En su edición 15 se llevó a cabo el Congreso Internacional del Transporte “La Ruta del Cambio al 2030”, organizado por la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), evento que reunió nuevamente a los involucrados en el sector transporte público y la movilidad, como autoridades de gobierno, organismos internacionales, iniciativa privada y academia para compartir experiencias y conocimientos y así fortalecer los vínculos, buenas prácticas y proyectos de movilidad a nivel nacional e internacional.
Un evento que reúne anualmente a personajes involucrados en el transporte y la movilidad y que se ha consolidado como uno de los principales congresos en América Latina que busca soluciones para una movilidad urbana sostenible y que desde su inicio ha sido fundamental el diálogo para compartir buenas prácticas y soluciones para la implementación en la región de mejores sistemas de transporte y contribuir a la modernización y desarrollo del sector en beneficio de los usuarios y de los operadores, indicó Nicolás Rosales, presidente de la AMTM.
Agregó que a pesar de que las necesidades y condiciones han cambiado en estos años, “nuestra misión permanece inalterable, contribuir a una mejor calidad del servicio, usar energías limpias para aminorar el impacto en el medio ambiente y alcanzar la sostenibilidad de los sistemas de transporte. La agenda 2030 es un plan de acción global, adoptada por todos los integrantes de las Naciones Unidas en septiembre de 2015 y consiste en 17 objetivos de desarrollo sostenible, que se refieren a los desafíos más importantes y apremiantes a nivel mundial, como erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar el bienestar de todas las personas”.
De dichos objetivos, continuó, el número 11 se refiere específicamente a ciudades y comunidades sostenibles, su enfoque busca que las ciudades sean asentamientos humanos inclusivos, seguros y resilientes, entre otras acciones, mediante un transporte limpio y una movilidad sostenible, temas a tratar durante el 15º CIT.
“Es importante que avancemos hacia una transición justa y un modelo de desarrollo posible, pero las inversiones serán imprescindibles para alcanzar bajas emisiones, una amplia movilidad y mejorar la competitividad”.
Debe considerarse que el transporte público es la forma más rápida y asequible de reducir emisiones, a medida que las zonas urbanas crecen la necesidad de un transporte público sostenible y eficiente se vuelve prioritario, por lo que son indispensables políticas públicas que impulsen la modernización del sector, esquemas de financiamiento para el uso de energías limpias, modernización del sector y la reducción de la huella de carbono.
México, resaltó Rosales, se encuentra entre los 10 lugares en cuanto a la emisión de gases de efecto invernadero, el sector transporte es responsable de la emisión de 148 millones de toneladas de CO2, lo que ha ocasionado la muerte de más de 20 mil personas anualmente de manera prematura, por temas de contaminación y mala calidad del aire.
También el sector transporte es el principal consumidor de energías fósiles, por lo que su transformación implica una transformación profunda y estructural en todos los aspectos. Se requiere el fortalecimiento institucional por parte de las autoridades, marcos regulatorios que den certeza tanto a los operadores como a los inversionistas, modelo de negocios viables que permitan el acceso al financiamiento, modelos de operación que permitan la profesionalización de los operadores de transporte público y el uso de energías limpias.
“Si queremos construir un futuro sostenible tenemos que construir ciudades también sostenibles, donde la movilidad urbana juega un papel importante. Construir una verdadera cultura de sostenibilidad y avanzar hacia ciudades más verdes, competitivas, incluyentes y prósperas, requieren del compromiso y trabajo de todas y todos. La colaboración entre los distintos sectores, los gobiernos y autoridades es prioritaria, sobre todo unidad”.
En su momento, Jesús Padilla, fundador de la AMTM, indicó que el problema de la movilidad es de todos y en este mundo globalizado solo sobrevive el que se adapta mejor y es un hecho que en el mediano y largo plazo las ciudades no van a poder sostener el actual modelo de operación del transporte y crecimiento urbano.
“Debemos asimilar con claridad un nuevo enfoque para contar con una nueva visión urbana y entender que hay una gran revolución tecnológica, sin dejar de lado la complejidad que tiene el reordenamiento urbano y el impacto social que ello implica”.
En los próximos 10 años, continuó, muchas ciudades van a duplicar su parque vehicular, estableciendo una competencia asfixiante por las vialidades y el espacio público; la congestión vial cuesta más de 100 mil millones de pesos y una persona deja en el transporte público al menos 3 años de su vida.
Finalmente, destacó que uno de los objetivos principales del 15º CIT es establecer cuatro temas en la agenda pública para contribuir a instaurar una movilidad transversal, la tecnología, la certeza jurídica y operativa, la sustentabilidad financiera y política tarifaria, así como incentivos fiscales.