El consejo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), amparará a las mil quinientas empresas agremiadas, así como a pequeñas y medianas empresas que lo deseen, en contra de las medidas fiscales anunciadas a finales de diciembre pasado.
Señaló Andrés Ocejo, presidente del organismo, al referirse a las modificaciones a la Ley del Impuesto Sobre el Activo (IMPAC) y a la fracción segunda del artículo 42 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, en cuanto a la deducibilidad de automóviles nuevos, de 300 mil a 175 mil pesos.
Dichas medidas, explicó el presidente de la AMDA, afectan al negocio de la distribución automotriz, que son empresas que operan con niveles altos de endeudamiento por los vehículos disponibles en sus patios y que deben a bancos y financieras de las plantas automotrices.
“No contentos con que exista el ISAN, el IVA y la tenencia, ahora además tendremos que pagar el impuesto al activo de forma desproporcionada, ya que no podemos pagar impuestos sobre lo que no es nuestro”, argumentó Ocejo.
Pero además es un factor que inhibe la inversión extranjera y prueba de ello es que Ford América del Sur, llevará su primera inversión del año hacia Brasil y no a México, por los impuestos en nuestro país, comentó el dirigente de la AMDA.