La Cámara de Diputados recibe en audiencia a la AMIA

Eduardo J. Solís Sánchez, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), se reunió con la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados, que preside Ildefonso Guajardo, con el fin de hacerle una presentación sobre la situación crítica por la que atraviesa el sector.

         Durante más de una hora, el titular del organismo se refirió a los diferentes puntos que aquejan a la industria automotriz, que tiene una caída de las ventas del mercado interno de más de 31 por ciento en el año. “Suman 15 meses de caída libre las ventas al mercado nacional”, señaló.

         Asimismo hizo énfasis en el efecto negativo que ha tenido para la industria, la posposición de compra de bienes durables del consumidor frente a la crisis económica y la incertidumbre genera en sus propias finanzas.

         El índice de confianza del consumidor, continuó, se encuentran en los niveles más bajos de la historia a nivel mundial. En México en octubre de este año, según Banxico y el INEGI, dicho índice tuvo su caída más importante desde que éste se construye.

         Solís mostró también una reseña del efecto negativo que dejó al país la entrada de 4.5 millones de autos usados de procedencia extranjera, lo cual ha llevado a envejecer el parque vehicular con las consecuencias negativas al medio ambiente y el uso de combustibles, además de crear una sobreoferta de vehículos usados en el país.

         Una situación que inhibió el crecimiento de 80 por ciento del mercado interno, depreciando los autos usados nacionales y dejando de crear más de 350 mil empleos en el sector.

         Ante tal panorama, la asociación solicitó mantener el Decreto que ordena la entrada de autos usados al país y urgió imponer mecanismos de verificación de emisiones y condiciones físico-mecánicas, así como la obligatoriedad del REPUVE en frontera como eje del emplazamiento en los Estados.

         Para reactivar el mercado, solicitó contar con un programa de eliminación temporal de la carga fiscal que afecta a la venta de autos nuevos, elevar el nivel de deducibilidad y ampliarlo a todo el territorio nacional.

         Y ante el escaso resultado obtenido del programa piloto de renovación del parque vehicular (5,357 vehículos chatarrizados en 15 semanas, 1% de las ventas de 2008), solicitó evaluar la posibilidad de contar el próximo año con un programa más robusto que permita tener efectos importantes en las ventas al mercado nacional.

         Al finalizar, la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados ofreció revisar a fondo los planteamientos presentados por la AMIA.